Seis novillos de la ganadería de Pedrés han protagonizado un cuarto encierro rápido, vistoso y limpio por las calles de Calasparra (Murcia). La carrera se desarrolló en un principio con la manada reunida y hermanada; sin embargo, desde mitad del recorrido los astados se adelantaron y terminaron llegando –los seis- por delante de los bueyes a la plaza de toros. Eso permitió a los corredores disfrutar de espectaculares carreras (especialmente en el tramo final), aunque con algunos momentos de peligro debido a los derrotes y miradas de los novillos. El encierro concluyó en un tiempo de 3 minutos y 5 segundos, y no hubo que lamentar percances de importancia durante su desarrollo.
