El segundo encierro de las fiestas de Calasparra (Murcia), con novillos de la ganadería de Prieto de la Cal, ha concluido en un tiempo de 24 minutos y 45 segundos, dejando a su paso dos heridos, uno por asta de toro. La carrera transcurrió con la manada muy estirada, disgregada y con, al menos, un toro rezagado junto a otro par de cabestros. Los novillos de Prieto de la Cal protagonizaron una carrera muy peligrosa y emocionante, realizando derrotes a los corredores, abriéndose a ambos lados de la calle y provocando algunos sustos de importancia. Además, un novillo quedó rezagado en la salida, y terminó quedándose solo en mitad del recorrido tras amagar con volverse en dirección contraria. Gracias a la labor de los pastores y corredores, el astado fue reconducido hasta la plaza, donde aún se encontraba otro de los ejemplares ofreciendo notables complicaciones para ser enchiquerado. De hecho, ambos novillos fueron los ‘culpables’ de alargar el tiempo hasta los casi veinticinco minutos. El herido por asta de toro fue un hombre que sufrió una cornada “profunda” en el gemelo izquierdo, por lo que fue intervenido con éxito por el Doctor Ricardo Robles en la enfermería de la plaza de toros.
