* Crónica vía: DAVID BUSTOS
15 de mayo, día de San Isidro y sin toros en Las Ventas. Imperdonable. A pesar de ello, Vistalegre volvió a celebrar una corrida de toros enmarcada dentro de la llamada feria de “San Isidro”. Suelto y sin excesiva entrega salió el primer toro de Alcurrucén. No obstante, el animal humilló en los capotes y El Juli se gustó con un ceñido quite por chicuelinas, remetado con una gran media. No fue un toro fácil para banderillear, había que llegarle mucho al toro y eso puso en apuros a los banderilleros. Otra condición mostró el de Alcurrucén en el inicio de faena con la muleta. Embistió con prontitud y cierta transmisión, y El Juli lo sometió desde el primer muletazo con la mano derecha. Quietud y valor del torero madrileño, que tragó con toques fuertes y mucho mando ante el exigente toro de Alcurrucén. Más parado pero con mucha clase por el pitón izquierdo, El Juli también logró someter al toro con la mano izquierda. Llevándolo muy largo. Muy metido en los vuelos. Con la mano derecha, El Juli impuso más ligazón y un final totalmente arrebatado con un molinete y varios pases de pecho, puso en pie a Vistalegre. Encastado el toro de Alcurrucén que tuvo fondo y fue a más en el último tercio. Estuvo por encima de él El Juli, muy firme por ambas manos y toreando con verticalidad en todo momento, como ya hizo hace pocos días en Las Ventas. “A la madrileña”, El Juli volvió a ofrecer una gran dimensión, al entender y cuajar de principio a fin al toro. No acertó con los aceros. Ovación con saludos y aplaudido el toro en el arrastre.
Le costó humillar de salida al segundo toro de la tarde, a pesar de que cumplió en el caballo. Buen tercio de banderillas -de mucha exposición- pero deslucido inicio de faena de José Mari Manzanares. La falta de entrega del de Alcurrucén y las complicaciones que ofrecía este por ambos pitones en los finales de muletazo, especialmente en las partes finales de las tandas, impidió a Manzanares relajarse y torear templado. Esfuerzo y disposición del torero que fue volteado sin consecuencias en la parte final de la faena. Difícil el toro -se movió pero nunca terminó de humillar- de Alcurrucén, y muy firme Manzanares en esa última tanda final con la mano derecha. Gran estocada. Ovación con saludos tras petición de oreja.
Apretó y humilló el tercero de Alcurrucén en el capote de Paco Ureña, que dejó un buen lance a la verónica antes de sacarle hasta los medios. Gran quite del torero murciano, toreando a la verónica con los vuelos del capote más recogidos pero con gran lucimiento y templanza. Brindó el toro a Miguel Abellán y comenzó la faena en el tercio con la mano derecha. Le costó definirse en la muleta al de Alcurrucén, que embistió siempre con mucha irregularidad -brusco en ocasiones- y eso dificultó el lucimiento de la faena de Paco Ureña. Buscando siempre la colocación y haciendo todo con naturalidad, la faena del murciano careció de rotundidad y el esfuerzo del torero no fue suficiente para que aquello rompiera. Toro complicado y exigente. Disposición de Ureña que lo toreó por ambos pitones sin tener eco en los tendidos. Estocada al segundo intento y varios golpes de descabello. Ovación con saludos.
Brindis al público de El Juli, que vio como el toro embestía rebrincado y muy descompuesto por el pitón derecho en el inicio de faena. Más certeza y calidad tuvo el toro de Alcurrucén por el pitón izquierdo, y uno a uno fue robándole los muletazos. Sin terminar de llevarle sometido por abajo en esas primeras tandas, pero toreándolo siempre con firmeza y seguridad, El Juli logró que la faena fuera yendo a más. Con paciencia, poso y un absoluto conocimiento de la lidia, el torero madrileño logró taparle los defectos al toro y consiguió que embistiera entregado en las últimas tandas. De nuevo, con la figura totalmente vertical y haciendo todo en un palmo de terreno, El Juli cuajó una gran faena con un toro que terminó yendo a más por la inteligente labor del matador. Muy templado toreó El Juli con la mano derecha -el toro ya embistió humillando y con mucha más calidad por ese pitón-, pasándose los pitones por los muslos. Firmeza y mucho poder derrochó el toreo al natural de El Juli, que puso el broche final a su faena con una tanda por luquecinas y un lucido cambio de mano. Falló con la espada y perdió los trofeos. Ovación con saludos.
Inteligente y con suavidad toreó Manzanares de salida al quinto toro de Alcurrucén, que ofreció muchas complicaciones a la hora de banderillear. Muy exigente el toro en el inicio de faena, que acudió con prontitud a los cites y pedía mucho mando. Si no, se revolvía y le costaba en el final de las tandas. Transmitiendo mucho, Manzanares dejó grandes muletazos con la mano derecha. Muy firme y seguro por ese pitón. Sin embargo, la faena perdió intensidad con la mano izquierda, ya que el toro se quedaba más corto aún y salía con la cara arriba. Pronto cambio de mano Manzanares y volvió el lucimiento -por momentos- a la faena. Siguió embistiendo con emoción el de Alcurrucén por ese pitón derecho -a veces perdía la fijeza- pero los parones inesperados y lo incierto que fue en el tramo final de la faena provocó que la labor de Manzanares tuviera más altibajos. Falló con los aceros. Ovación con saludos.
Fría salida la del sexto toro de Alcurrucén, bien presentado también. Le costó a Paco Ureña ponerlo debajo del peto -salió muy suelto- pero luego cumplió con nota en el único puyazo que recibió. Muy bien picado. Manso el de Alcurrucén, dificultó la ligazón en los primeros compases de la faena. Cogía por abajo la muleta pero tras el segundo muletazo tendía a salir mirando al tendido. Apretándolo por abajo y tratando de que no se saliera de la muleta, Ureña estuvo muy dispuesto -sin éxito- con él. Le cambió los terrenos pero el toro seguía saliendo suelto y sin un ápice de emoción. Esfuerzo sin recompensa de Ureña, que no tuvo ninguna opción de triunfo con el manso y rajado sexto toro. Media estocada que obligó a usar el descabello. Palmas.
Palacio de Vistalegre (Madrid). Tercera corrida de la Feria de San Isidro. En torno a media entrada dentro del aforo permitido. Toros de Alcurrucén, bien presentados y de interesante -variado- juego. El Juli: ovación con saludos en ambos; José María Manzanares: ovación con saludos tras petición y ovación con saludos; Paco Ureña: ovación con saludos tras aviso y palmas.
Gran tarde de El Juli, plena de maestría, privándole los aceros de un triunfo incontestable. Interés, dentro de la desigualdad, en los toros de Alcurrucén, complicados los de Manzanares, que hizo el esfuerzo, y seriedad de Ureña, sin poder rematar. pic.twitter.com/o1tZrNeOtr
— Toros (@toros) May 15, 2021