“Miura recrea el infierno en Valdemorillo“, así se titula la crónica que firmó nuestro director David Bustos sobre el infernal encierro que protagonizaron los toros de Miura por las calles de Valdemorillo. Este, sin duda, ha sido uno de los momentos inolvidables del año 2019. Una mañana llena de emoción, de miedo y de respeto. Un cúmulo de sentimientos que inyectaron afición para el resto del año a todos los allí presentes. Y por supuesto, una experiencia única y durísima para los corredores.
El encierro fue una locura desde antes incluso de que comenzara. Los toros de Miura protagonizaron un desembarque realmente complicado: peleas entre ellos, derrotes contra los burladeros, miradas desafiantes a las personas… Esto fue un anticipo de lo que vendría minutos más tarde. El encierro, previsto para realizarse en una sola carrera, se desarrolló en varias debido a que varios toros quedaron rezagados. El último de los toros, el más peligroso del encierro, llegó a completar el recorrido de principio a fin en solitario. Ahí llegó el peligro, los sustos y las cogidas. Sin embargo, horas más tarde de concluir el encierro, saltaba la sorpresa: ninguno de los cinco heridos había sido herido por asta de toro. Todos ellos habían sufrido golpes y contusiones de diversa consideración. Por último, es de ley recordar que la corrida de Miura fue premiada por el ayuntamiento por su juego en el festejo vespertino.
A continuación, adjuntamos la crónica del encierro de Miura en Valdemorillo:
- Imagen de portada, vía: RAÚL GARCÍA