La localidad salmantina de Valero, una joya del toreo en el mundo rural, ha vivido este sábado una tarde especial en la que, como es tradición, el gran nombre propio de la temporada anterior, que en este caso era el sevillano Borja Jiménez, ha hecho el paseíllo.
Así, el de Espartinas ha comparecido en el pequeño municipio charro, al que en los últimos años han acudido a torear espadas como Morante de la Puebla, Emilio de Justo, Miguel Ángel Perera o Daniel Luque y, antes, figuras de la talla de Santiago Martín “El Viti”, Julio Robles o Victoriano Valencia.
Dejó dos obras de poso y entrega a los dos primeros toros de García Jiménez, a los que dejó también un templado toreo capotero. Al tercero, de Domingo Hernández, lo saludó con un bello recibo, parsimonioso, y luego dejó una faena compacta y de toreo de mano baja, con remates de serie de mucha expresión
El resultado fue el siguiente:
Toros de Garcia Jiménez y uno, el tercero, de Domingo Hernández. Borja Jiménez, en solitario: dos orejas, dos orejas y oreja